Orgullo Gallego

Dormido estaba este sentimiento de orgullo de ser de origen gallego, dormido en el rincón más profundo de mi corazón. Ahora aflora, se extiende y se irradia por los poros. La cultura gallega, el sentir de un pueblo luchador, por su historia y su lengua, me han hecho despertar de ese letargo. Mis padres son gallegos, que por circunstancias de la vida tuvieron que recalar en Argentina, tierra donde nací. Me crié entre gallegos pero mi adolescencia hizo que me hiciera indiferente a esta cultura. Luego en la madurez, encontré un grupo de gente que adoraba lo gallego y me asombré, interesandome nuevamente por mis raices. Hoy estoy residiendo en España cerca de Galicia, en el Bierzo, rodeada de sentir gallego, y sigo asombrada, de como un pueblo que ha sido vapuleado en cuanto a su cultura e idioma, lucha para que no muera ninguna de estas dos cosas. Esa lucha me ha hecho que amara más a Galicia. Mi materia pendiente es poder escribir en galego pero hasta ahora lo he logrado muy pobremente, me gustaría poder falarlo bien, como corresponde, respetando en toda su extensión la idiosincracia galega.
rositas. Ponferrada, 16 de junio de 2008